Arnold Rosner (1945- ) nació en la ciudad de New York el 8 de noviembre de 1945. De ascendencia judía estudió en la State University de New York en Buffalo, logrando doctorarse en 1971
La “Sinfonía Nº 1” Op.3 fue compuesta en 1961 durante su época de estudiante como trabajo académico.
La “Sinfonía Nº 2” Op.8 fue también compuesta en 1961, teniendo un origen similar a la anterior.
La “Sinfonía Nº 3” Op.20 fue compuesta en 1963, siendo también considerada como una obra de juventud.
La “Sinfonía Nº 4” Op.29 fue compuesta en 1964, siendo la última obra correspondiente a este primer periodo de su autor.
La “Sinfonía Nº 5” (Misa sine Cantoribus super ‘Salve Regina’) Op.57 fue compuesta en 1973, siendo la primera de su periodo de madurez. Se trata de una misa sinfónica estructurada en cinco movimientos, de acuerdo al ordinario de la misa católica romana. Podemos preguntarnos lo que ha llevado a un judío a escribir una misa católica.
Escrita durante los años en que la juventud de su autor le permitía todavía una valoración simplista de los hechos. Entonces le atraía la idea del pacifismo cristiano, el Dona nobis pacem, el presentar la otra mejilla y cosas por el estilo. Los Estados Unidos habían caído en el negro pozo de la guerra del Vietnam y muchas iglesias estaban implicadas en el movimiento pacifista. Olvidando el resto de realidades, esta Misa sin cantantes es una acción contra la guerra.
La sinfonía está dedicada a George McGovern, el candidato demócrata, que fue ampliamente derrotado por Richard Nixon en las elecciones presidenciales de 1972. Era un defensor de acabar con la guerra del Vietnam.
El primer movimiento, Kyrie, se basa en un motivo gregoriano perteneciente a la Salve Regina. Se desarrolla de manera polifónica mediante modos arcaicos. Alterna momentos de gran recogimiento con otros de mayor fuerza, con sonidos místicos parecidos a la música de Vaughan Williams. Después de llegar a su climax la música continúa avanzando suavemente, con delicadas intervenciones solistas de la madera hasta llegar a una tranquila coda.
El segundo movimiento, Gloria, tiene la estructura de un rondó basado en una frase del gregoriano, mediante un componente rítmico que se va repitiendo. Un solo de la trompeta interpreta la entrada, lo que en la misa se denomina incipit, que precede a una especie de alegre danza. Una música que se remonta a tiempos de los Tudor está presente en su espíritu.
El tercer movimiento, Credo, empieza con recogimiento mediante meditaciones musicales que nos recuerdan el estilo de Hovhaness. La música aumenta su intensidad alcanzando un emotivo climax en su coda.
El cuarto movimiento, Sanctus, empieza con la presentación de la melodía gregoriana de la Salve, en la forma más clara de toda la obra. El material se repite diversas veces en forma variada aumentando su complejidad. Termina mediante una triunfal coda.
El último movimiento, Agnus Dei, empieza presentando el tema gregoriano en un modo lento distorsionado, desarrollándolo de un modo orgánico. Después de llegar a su climax en la parte central, el tema sigue su camino en forma contrapuntística, para terminar de modo solemne.
Una obra de estilo neo-modal basada en la Salve Regina del canto gregoriano. Un estilo que presenta una fusión entre la polifonía del Renacimiento y el estilo moderno propio de Rosner. Una obra original que interpreta la misa gregoriana renacentista, convirtiéndola es una especie de sinfonía romántica. Presenta un bello remanso de paz, en un momento en que el mundo estaba infectado por las llamadas bélicas.
La “Sinfonía Nº 6” Op.64 fue compuesta en 1976, sin que tengamos más datos sobre la misma.
Rosner trabaja actualmente en la Facultad de Música del Kingsborough Community College en Brooklyn, New York. Su música ha sido interpretada en los Estados Unidos y en Israel. Ha escrito también obras para el Servicio Sagrado de las sinagogas y otras basadas en la tradición judía, como “A Sephardic Rhapsody” de 1992, con inclusión de música étnica. Cuando le preguntan por sus creencias contesta “La música es mi religión”.
Su estilo, como el de muchos compositores actuales, se ha vuelto más conservador. Empezó a componer en los años 1960, cuando el fervor atonal inundaba la escena. Actualmente piensa que compositores de vanguardia como Milton Babbitt (1916) representan la música basura realizada en aquella época. Una época centrada en un tipo de estética autodestructiva. Según las declaraciones del compositor tomadas de una entrevista radiofónica, nos dice que en aquellos años se quemó al público, perdiendo las posibilidades de que se interesara en la nueva música. Como ejemplo, nos dice que había compuesto más de 60 obras antes de que alguna de ellas se interpretara.