PARRA

Hèctor Parra (1976-) nació en Barcelona. Comenzó su formación musical en el Conservatorio Municipal de Barcelona, bajo la dirección de Carles Guinovart y David Padrós. Posteriormente recibiría clases de Brian Ferneyhough y Jonathan Harvey.

En 2001 cursó un máster de electroacústica por la Universidad de París VIII, tras el cual empezó a trabajar como compositor residente en el IRCAM, Institut de recherche et coordination acoustique/musique de París. En 2002 recibió el Premio de composición musical del INAEM. Actualmente es profesor de composición en el IRCAM-Centre Pompidou de París.

Su obra se caracteriza por un discurso compositivo basado en la indagación sonora por medio de recursos electrónicos. De su producción, cabe destacar "Chroma" (2004-2006) para gran orquesta, "Leaves of Reality" (2006-2007) según el propio autor, una «experiencia sonora para dos vocalistas, conjunto instrumental y electrónico.

La “Chamber Symphony Nº 1" (Quasi Kristall) compuesta en 2005 está escrita para música electrónica y orquesta de cámara, compuesta por dos flautas, una doblando piccolo, oboe, clarinete, fagot, trompa, trompeta, trombón, percusión con variados elementos sonoros y cuerda.

La “Chamber Symphony Nº 2" (Fibrillian) compuesta entre 2007 y 2008 es una obra para orquesta de cuerda de unos 12 minutos de duración. Escrita para un encargo de Ernst Kovacic y la orquesta de cámara de Wroclaw para el Festival de Otoño de Varsovia del año 2008. Se presentó en Barcelona durante su estancia como compositor residente, los días 10, 11 y 12 de marzo de 2017, interpretada por la Orquestra Simfònica de Barcelona i Nacional de Catalunya dirigida por Josep Pons.

Está orquestada para seis violines primeros, seis violines segundos, cuatro violas, cuatro violoncelos y dos contrabajos. Se estrenó en 2008 durante el citado Festival de Varsovia interpretada por la orquesta de Cámara de Wroclaw dirigida por Ernst Kovacic.

Como no poseemos ninguna grabación de esta obra a continuación introducimos la nota explicativa escrita por el propio compositor en el concierto de su estreno.

En Fibrillian, las texturas instrumentales devienen fibras sonoras minuciosamente cinceladas que podríamos asociar, en cierto modo, a las fibras musculares del corazón. He intentado una cohabitación de diferentes «estados emotivos» o energéticos, polifónicamente entrelazados, que nos hagan vivir intensamente cada instante, palpitar. Así, a la electrizante propulsión de un sforzato estridente sobre posición armónica natural se contrapone la angustiosa retención de un écrasé sobre las notas graves del registro. Y la encantadora ligereza de los glissandos de armónicos sul ponticello contrasta con la cálida y acogedora sensación producida por un motivo melódico sul tasto.

En esta obra busco estimular en el oyente un máximo de sensaciones anímicas –la urgencia que sentimos ante lo inalcanzable, la ternura que florece en la frontera del umbral perceptivo, la efímera plenitud, el insostenible frenesí... Estas sensaciones van forjando una forma dramática temporal cíclica y de carácter trágico, que encontrará la resolución de las progresivas fricciones en el choque más absoluto: los abruptos y oscuros écrasés que aniquilan toda posibilidad futura y los utópicos, débiles y desesperados trémolos de armónicos agudos. Entretejido a lo largo de casi toda la obra encontramos un canto singular, roto, que lucha por mantener la individualidad vital.

En esta aventura sonora, la polifonía está entendida no solamente como entretejido de líneas melódicas desarrolladas temporalmente sino también de materiales - haces de fibras - que tienen una componente tímbrica característica que también evoluciona en el tiempo. Así, logramos una mayor expresividad, fusión y plasticidad sonoras que nos deben permitir superar la enquistada dicotomía entre música esencialmente tímbrico-gestual y música rítmico-interválica.

La "Chamber Symphony Nº 3" (Sirrt die Sekunde) compuesta en 2008 para orquesta de cámara se basa en un poema de Paul Celan y presenta la relación entre la proximidad de una superficie resonante y una expresión que brota a través de esta superficie. El desarrollo de la obra se basa en la diferenciación temporal, no solo de las voces individuales sino también de los timbres instrumentales a que están unidos. El sonido, entendido como una estructura compleja circunda ciertos parámetros, es algo más que una cubierta para una composición abstracta, es en sí mismo polimórfico y sujeto a fluctuación.

Durante su residencia con el Ensemble Intercontemporain en París surgió el proyecto para su ópera "Hypermusique Prologue" (2009). Usa el best-seller científico Warped Passages escrito por la catedrática de Física de la Universidad de Harvard Lisa Randall, en el que populariza los grandes descubrimientos en el campo de la física, que aparecen en el pasado siglo, relatividad, física cuántica, etc. El libreto escrito por la propia científica se basa en un viaje hacia la quinta dimensión según el modelo Randall-Sundrun del espacio-tiempo. Para ello usa una música experimental con procedimientos electrónicos con el fin de lograr una música de características nuevas.

Lo que tenemos de preguntarnos es si este tipo de música puede llegar al público y conmoverlo o se trata solamente de una música experimental entendida solamente por los expertos. Pero también es un modo de preparar la música del futuro.

En 2014 estrenó en Múnich su cuarta ópera "Das geopferte Leben" (La vida sacrificada), una revisión, original y llena de humor, del mito de Orfeo, con libreto de la escritora francesa Marie N'Diaye. Compositor residente del Auditori de Barcelona durante las temporadas 2015-16 y 2016-17.

La música escrita por Parra es complicada. Se necesita tener mucha experiencia auditiva para su comprensión. No se puede apreciar en una simple audición. Dentro de su música se encuentran innumerables relaciones internas, fragmentados campos energéticos, aunque le encanta convocar todas las fuerzas en los tuttis.