2 - La sinfonía en el Siglo XIX
Haydn y Mozart fueron modelos para un grupo de compositores austríacos. Entre ellos encontramos a Adalbert Gyrowetz (1763-1850), un compositor de origen bohemio al que algunas de sus sinfonías habían sido confundidas con las de Haydn, Wenzel Pichl (1741-1805), también bohemio, autor de unas ochenta y nueve sinfonías, Paul Wranitzky (1756-1808), amigo de Mozart y de Beethoven, Ignaz Umlauff (1746-1796) o Johann Baptist Gänsbacher (1778-1844). Estos fueron algunos de los expertos autores que no mostraban ningún interés por las innovaciones sinfónicas.
Beethoven supone un cambio enorme en la evolución de la sinfonía, llevando a la forma clásica al máximo esplendor y realizando la transición al periodo romántico. En el año 1813 aparecen sus sinfonías séptima y octava. Entre este año y 1839, en el cual se estrena la novena de Schubert, logrando un gran éxito, aparecen una serie de compositores que intentarán atraer el éxito del público. Sus sinfonías fueron publicadas durante estos años y muy apreciadas por sus contemporáneos. Intentaremos explicar porque esta generación de sinfonistas ha sido casi olvidada por la historia.
Estas obras desaparecieron de los programas a partir de 1840. El público había tomado como norma las sinfonías de Beethoven y quería que las obras que se interpretasen fuerande este estilo. Veamos lo que escribe un crítico de la época en 1829.
“Si las obras de otros compositores se parecen demasiado a las de Beethoven, se les acusa de imitaciones. Pero si se alejan de este modelo no interesan al público”.
Todos tienen algo en común. Llega un momento en que encuentran que su estilo está desfasado y no interesan a la gente que paga para escucharlas. Entonces no solo dejan de componer, sino que ni siquiera publican sus últimas obras.
Del clasicismo se ha pasado al romanticismo pleno. Desde la muerte de Beethoven en 1827 hasta el principio de los años 1840, con los estrenos de las primeras grandes sinfonías del romanticismo, la novena de Schubert, se encuentra un periodo que podríamos llamar de transición. Durante este período también se encuentran las sinfonías de los tiroleses Josef Netzer (1808-1864), Johann Rufinatscha (1812-1893) o Matthäus Nagiller (1815-1874). Finalmente encontramos los dos grandes compositores del Siglo XIX, Bruckner y Mahler, el máximo exponente del romanticismo, con el cual ya nos trasladamos al Siglo XX.