SINFONIA DE CAMARA Op. 49a

La “Sinfonía de cámara”  (Eine kleine Symphonie) Op.49a es como se ha dicho una orquestación del “Cuarteto nº 1 en do mayor” Op.49 realizada por el director de orquesta ruso Rudolf Barshai (1924-2010). Miembro fundador del Cuarteto Borodin en 1945, frecuentemente interpretaba los cuartetos de Shostakovich. Realizó arreglos para orquesta de cámara de varios de dichos cuartetos.

El primer movimiento, moderato, está escrito en forma sonata. El primer tema es de carácter ondulante. El segundo tema se caracteriza por su acompañamiento, formado por breves notas continuas, sobre el cual se construye la melodía. Después de un breve desarrollo, la recapitulación nos conduce hasta una tranquila coda.

El segundo movimiento, moderato, es el movimiento lento de la sinfonía. Consiste en un tema de carácter folclórico presentado por la viola, seguido por cuatro variaciones melancólicas, siendo las dos primeras más ligeras, para terminar con las dos siguientes en modo menor, la tercera se caracteriza por su acompañamiento en pizzicato.

El tercer movimiento, allegro molto, corresponde al scherzo. Nos presenta un tema nervioso con notas repetidas que contrasta con un trío más relajado de carácter melódico. El scherzo se repite de modo abreviado.

El último movimiento, allegro, empieza con un tema enérgico, antes de presentarnos un segundo tema más melódico. El desarrollo es de carácter alegre, que nos conduce a una vibrante recapitulación.

Una sinfonía en miniatura, como indica su título, relacionada con su gran obra para cuarteto de cuerda. Orquestada en 1995 por Rudolf Barshai.

Shostakovich seguidamente escribe una “Suite sobre la ‘Trilogía de films de Maxim’ para coros y orquesta” Op.50a. La “Trilogía de Maxim” era una serie de tres películas realizadas entre 1934 y 1938 con música del compositor. Un tema revolucionario épico, teniendo como protagonista a Maxim, hijo de un obrero de Leningrado. Una obra realista según el gusto de los dictadores.

También en el mismo año escribe su “Segunda Suite para orquesta de jazz” Op.50b, a petición de la Orquesta del Estado para el jazz, dirigida por Victor Knouchevitski. Pero la música está pensada para el Ejército Rojo, escrita en un tono popular más próximo a las danzas vienesas de Johann Strauss que al jazz occidental, el cual era calificado como decadente. Se puede considerar a esta obra como la sana respuesta dada por los soviéticos a la degradación moral de occidente, mostrando el tipo de música tradicional que realmente deberían interpretar las llamadas orquestas de jazz, en vez de las aberraciones musicales de los negros.