Enric Palomar (1964-) nació en Badalona en 1964, estudiando en el Conservatorio de Barcelona. Amplió su formación con Benet Casablancas y Joan Albert Amargós. Accésit en el X Concurso de Composición de la Generalidad de Cataluña por "Interludio Alegórico" (Homenaje a Claude Debussy).
Ha escrito numerosas obras de cámara para diversas formaciones y solistas, entre las que destacan la ópera "Ruleta", con libreto de Anna Maria Moix y Rafael Sender, estrenada en el Mercat de las Flors de Barcelona en 1998.
Su segunda ópera "Juana", basada en la vida de Juana I de Castilla, con libreto de Rebecca Simpson, se estrenó en la Oper Halle de Alemania en 2005, con representaciones posteriores en el Teatro Romea de Barcelona y en el Staatstheater Darmstadt de Alemania.
"Thamar y Amnón" es una cantata escénica para soprano, mezzosoprano, tenor, bajo, cuatro pianos y percusión, con dos bailarines de flamenco, estrenada el 20 de abril de 2006 en l'Auditori de Barcelona. Se basa en el poema de García Lorca sobre esta historia de violación narrada en la Biblia.
El Gran Teatro del Liceo le encargó la composición de la ópera "La cabeza del Bautista", basada en la obra homónima de Valle-Inclán con la que debutó en el coliseo barcelonés el 20 de abril de 2009.
El “Concierto para piano y orquesta" compuesto en 2011 como encargo de la OBC y de la Fundación Autor, se estrenó el 30 de abril de dicho año, interpretado por la OBC con el pianista Iván Martín bajo la dirección de Josep Caballé Domenech.
El primer movimiento es iniciado por el piano mostrando todo su potencial virtuosístico. Según indica el compositor, la forma es como un juego de rol para forzar la memoria musical de quien la escucha. Luego el piano inicia una cadenza que acompaña la orquesta para presentar la célula musical, que encontraremos en el resto de movimientos. La música va difuminándose en la coda.
El segundo movimiento tiene la forma de un scherzo iniciado por el solista, seguido por un vigoroso diálogo entre el piano y la orquesta tímbricamente muy poderosa. En la sección central correspondiente a lo que sería el clásico trío la música parece tranquilizarse, pero pronto recobra la fuerza inicial.
El tercer movimiento, Nocturno, se inicia con un solo del corno inglés. Es seguido por el piano con un carácter triste, que poco a poco va creciendo frente a una orquesta que busca una naturaleza rítmica y más agresiva. Una etérea coda cierra el movimiento.
El cuarto movimiento es otro scherzo con espíritu de tocata, donde el piano se convierte en su absoluto protagonista con una marcada fuerza rítmica. Termina con un fugatto, donde como en un collage se escuchan los temas que han aparecido a lo largo del concierto.
Un concierto que sin abandonar una música comprometida con su época contemporánea busca una comunicación con el público, sin renunciar al lirismo ni a las aportaciones del pasado.
“Negro Goya" es una música de ballet realizada por encargo del Ballet Nacional de España, con su director José Antonio, que lo estrenaron en los Jardines del Generalife de la Alhambra de Granada durante el Festival Internacional de Granada en el mes de julio de 2011, con la participación de la Orquesta Ciudad de Granada bajo la dirección de Josep Caballé-Domenech.
Está inspirado en los cuadros de la serie negra del pintor Francisco de Goya, con un argumento centrado en los últimos años del pintor acompañado por Leocadia. Está dividido en nueve cuadros. El primero lleva por título, El sueño de la razón produce monstruos, comentando el citado aguafuerte de la serie Caprichos publicado en 1799. Su explicación es según el manuscrito de Ayala, que la fantasía abandonada de la razón produce monstruos y unida con ella es madre de las artes. Negro y sombras iniciales se mueven en un ambiente musical onírico, de las que surgirán Los Caprichos y Goya.
La música con un estilo bastante ecléctico de carácter dramático está influenciada por los ritmos folclóricos de la música andaluza.
El segundo cuadro, Leocadia. Se trata de la pintura de este nombre que formó parte de la decoración de los muros de la casa de campo que adquirió Goya en las afueras de Madrid, conocida como la Quinta del Sordo. Representa a una mujer madura o manola vestida de luto que apoya su codo en un montículo de tierra sobre el que se ve una verja que habitualmente se colocaba en las tumbas. Según la crítica la mujer representada es Leocadia Zorrilla y Galarza, o Leocadia Weiss, pues estaba casada con Isidoro Weiss, comerciante de joyas judío alemán, criada por su tía materna Juana Galarza, consuegra de Goya, y amante de Francisco de Goya, con quien vivía en la Quinta del Sordo junto a dos de sus tres hijos, Guillermo y Rosario.
La expresión del rostro es triste o nostálgica y se piensa que la tumba podría aludir al reposo definitivo de Goya, con Leocadia viuda del pintor, como premonición de la muerte o bien recordando la grave dolencia, tifus, que a punto estuvo de acabar con la vida del aragonés en 1819.
El tercer cuadro se titula, Leocadia frente a los Caprichos. Leocadia proporciona lo corpóreo y el realismo. Sus temas presentados en el anterior cuadro son profundamente femeninos y líricos pero con una evidente furia contenida.
El cuarto, Pas de deux, está protagonizado por Leocadia y Goya. Un movimiento de carácter lírico con intervenciones solista de la madera.
El quinto cuadro lleva como título, Los desastres de la Guerra. Goya pinta una serie de 82 aguafuertes reflejando los actos dolorosos acontecidos en Madrid, en el mes de mayo de 1808 durante la Guerra de Independencia frente a los franceses.
Protagonizado por el pueblo y los soldados la escena comienza con una música expresiva de la tragedia reflejada en los cuadros goyescos de esta serie. Ritmos de un infausto bolero nos llevan a una expectante escena, que se desarrolla con violencia mediante ritmos sincopados de carácter ostinato, seguidos de aires flamencos.
El sexto cuadro se titula, El Rey y la Inquisición intentan doblegar a Goya. Los símbolos del poder se suceden en una procesión lenta. Casi se percibe una sensación de procesión macabra. El Rey y la Inquisición vencen. Los inquisidores y los soldados aparecen con ritmos militares. Las notas del arpa acompañan la parte central más tranquila pero sin abandonar su carácter trágico. Un solo del corno inglés nos introduce a una sección más rítmica que termina el cuadro con violencia.
El séptimo cuadro es el, Abatimiento de Goya. Goya ha perdido y se encuentra abatido. La música acompaña la escena bailada por el protagonista. Refleja el carácter depresivo y derrotado del pintor.
El octavo cuadro, Pas de deux, es bailado por Leocadia y Goya. Leocadia está decidida a llevarse a Goya al refugio del exilio. El piano y la cuerda expresan un sentimiento de tristeza, seguido por un tema lírico y una música de carácter reflexivo, terminando mediante repetidos trágicos golpes de la percusión.
El noveno cuadro, se divide en tres escenas. La primera es titulada Aquelarre. El macho cabrío del Aquelarre irrumpe en escena, desdoblando de nuevo lo real con lo irreal. Llamada al Aquelarre o danza orgiástica, que es bailada por toda la compañía.
La segunda escena representa la huida al exilio de Leocadia y Goya. La música se tranquiliza acompañando a la pareja protagonista con trágicos compases.
La última escena se titula, Duelo a garrotazos. Mientras Goya y Leocadia se retiran, se sucede el duelo a garrotazos, según el famoso cuadro del pintor. Unos compases expectantes y música agitada representan la pelea. Nuestras dos Españas nos superan a nosotros mismos, algo que quizás pareciera no tener fin, como indica el final de la partitura.
“Nunca los daré por muertos”, es una cantata estrenada en Barcelona en el Teatro Sala Barts el 23 de noviembre de 2013, interpretada por la Big Ensemble Taller de Músics. Es un homenaje al prestigioso poeta argentino Juan Gelman (1930-2014), compuesto por poemas del autor, que realiza un recorrido por el mundo creativo del poeta Premio Cervantes 2007.
El montaje, con dirección de Enric Palomar, se interpretó con las voces de los solistas Pere Martínez, Rosalia Vila, Paula Domínguez, Cordes del Món y el Cor de veus Taller de Músics Escola Superior d’Estudis Musicals.
Juan Gelman, nacido el 3 de mayo de 1930 en Buenos Aires, reconocido hoy como uno de los autores internacionales más respetados, sufrió la persecución de la dictadura militar argentina en 1976 por su actividad periodística y política. Estuvo exiliado en varios países de Europa y América, hasta que finalmente se asentó en México.
El poeta, luchador incansable a favor de los derechos humanos, sufrió las consecuencias del trauma de la dictadura. Sus hijos y su nuera, embarazada de siete meses, formaron parte de la lista de desaparecidos. Juan Gelman dedicó muchos años de su vida a la búsqueda de su nieta, hasta que la encontró en 2000.
Gelman, poeta, escritor y periodista, plasmó en su poemario Carta abierta, escrito entre 1979 y 1980, su doloroso exilio después del golpe de estado de 1976 en su Argentina natal. No sé si al final de la experiencia seremos o no mejores músicos, pero quizás sí que seremos un poco más libres, escribe Enric Palomar.
En 2014 estrena en la Neuköllner Oper de Berlín su cuarta ópera que lleva por título "Bazaar Cassandra".
El "Concerto for Orchestra" se estrenó en 2016, con motivo del Jubiläumskonzert 10 Jahre Staatskapelle Halle. Fue designado Composer in Residenz por la Staatskapelle Halle para la temporada 2017-2018, dentro de la cual estrena el ballet "Inferno" para el Ballet Rossa, con coreografía de Michal Sedlácek y la obra "Toxiuh Molpilia", poema coreográfico basado en un rito mexicano.
Para la celebración del centenario de la muerte de Granados en 2017 compone la obra para piano "Hominatio".
"Sonetos de Shakespeare" compuestos en 2017 se estrenó el 26 de marzo de dicho año, interpretada por la Banda Municipal de Barcelona con las voces de la cantante de soul Monique Makon, la cantante de flamenco Raquel Lúa, el cantaor José Manuel Vázquez y el rapsoda de rap Simón Taibi, dirigidos por Franck de Vuyst. Una obra multicultural que mezcla el rap con aires de soul y de cante flamenco.
El "Réquiem por el cantaor de los poetas", se estrenó en noviembre de 2017. Partitura sinfónico coral dedicada a la memoria del cantaor Enrique Morente, interpretada por la OBC ,Orquesta Simfònica de Barcelona i Nacional de Catalunya, con los solistas Pere Martínez, María Hinojosa y el Orfeó Català bajo la dirección de Josep Caballé Domenech.
El "Concierto de Granada para guitarra y orquesta" dedicado y estrenado por Sharon Isbin en 2018 en los Estados Unidos. En 2018 aparece también el disco Égloga, con obras escritas y encargadas por el cuarteto Barcelona Clarinet Players, con las obras "Égloga", "El maleficio de la mariposa" y "Epigramas Nazaríes".
Enric Palomar es un creador también cercano al mundo del jazz y la música popular, en especial al flamenco, ámbitos en los que ha desarrollado una gran actividad como compositor, arreglista y director musical. Pueden reseñarse, entre otras, sus obras "Lorca" para piano, la "Suite gitana" para cuatro pianos, percusión, voces, líricas y flamencas y baile, así como su composición "Poemas del exilio" sobre textos de Rafael Alberti, una suite flamenca para orquesta de cámara y voz flamenca interpretada por el cantaor Miguel Poveda.