MUÑOZ MOLLEDA

José Muñoz Molleda (1905-1988) nació en La Línea de la Concepción, provincia de Cádiz, el 16 de febrero de 1905. Hijo de una familia de clase media dedicada al comercio de muebles, recibe las primeras lecciones de música de Luis Criado, director de la rondalla en la que participaba el niño y donde nace su vocación artística, en el campo de la música y también en la pintura.

munoz-molledaEn 1921 se traslada a Madrid, estudiando en el Real Conservatorio al mismo tiempo que en la Escuela de Bellas Artes. Su amor por el arte se debate entre la pintura del maestro Julio Romero de Torres y las técnicas de composición de su maestro Conrado del Campo. Pero finalmente ganará su vocación por la música.

Escribe sus primeras obras en la década de 1930. Gana el Premio Nacional de Composición por su poema sinfónico "De la Tierra Alta" compuesto en 1932. Para ganarse la vida escribe música popular, dedicándose al mundo de la Canción Española, especialmente componiendo canciones para Imperio Argentina, como "Doncellita, no sueñes" de 1933 o "Gauchito zalamero" de 1931.

Con la suite orquestal "Rincones" gana las oposiciones para el Gran Premio de Roma en 1934. Es pensionado en la Academia Española de Bellas Artes de la capital italiana durante cuatro años. Allí recibe lecciones del gran maestro italiano Otorrino Respighi, que le influirá con su estilo conservador. La Guerra Civil española le sorprende en Italia y no regresará a España hasta 1939.

munoz-carmenA su regreso trabaja escribiendo bandas sonoras para el cine como "Carmen la de Triana" de 1939 o "Los hijos de la noche" del mismo año. El 4 de octubre de 1941 se casa en Madrid con la italiana, médico de profesión, Ione Gigliozzi que había conocido durante su estancia en Roma.

Por encargo de la Orquesta Nacional de España compone en 1940 el "Concierto para piano y orquesta Nº 1" que estrenará con Leopoldo Querol como solista.

"Introducción y fuga" compuesta en 1945 es una obra de estilo académico, como también las "Variaciones sobre un tema" para orquesta. En 1951 le conceden el Premio Nacional de Música por su "Trío en fa mayor" compuesto en aquel año.

En 1954 compone la suite para piano "Circo" de la que realiza una segunda versión para orquesta. Una obra modernista con influencias de Stravinsky conteniendo fragmentos casi atonales. La función descriptiva de la música podía hacer concesiones al atonalismo.

La “Sinfonía en la menor" fue compuesta en 1959, recibiendo el Premio de la Orquesta Municipal de Barcelona que además aseguraba su estreno. Este tuvo lugar el 15 de mayo de 1960 bajo la dirección de su titular Eduardo Toldrá.

El primer movimiento, introducción, allegro enérgico, empieza con una breve sección lenta que presenta un tema lírico con muchas disonancias. El allegro en forma sonata nos presenta un tema bastante cromático de carácter brioso, seguido por el segundo más apacible.  Durante la sección de desarrollo aparecen secciones muy cromáticas que sin abandonar la tonalidad la hacen muy inestable. El enérgico tema principal nos conduce a una coda de decidido carácter romántico.

munoz-molleda-cdEl segundo movimiento, lento, melancólico, emplea un amplio tema de carácter melódico, que se desarrolla siguiendo un estilo romántico de corte brahmsiano, pero que en algunos momentos llega al límite de la tonalidad. En cambio posee frases de embelesamiento romántico, habitual en las bandas sonoras que el compositor ha escrito.

El tercer movimiento, allegretto scherzando, corresponde al scherzo de la sinfonía. Empieza con algunas disonancias antes de aparecer el tema rítmico con connotaciones circenses, que se desarrolla utilizando diversas disonancias. La sección del trío es más melódica pero continúan las disonancias. Finalmente se repite el tema rítmico que nos conduce a la coda.

El cuarto movimiento, adagio, presto, empieza con un tema lento bastante desdibujado, que nos conduce a un motivo rítmico vivo, base del tema principal. Un segundo tema más melódico contrasta con el anterior. Durante el desarrollo continúan algunas disonancias, hasta aparecer un motivo soñador cuyo desarrollo nos transporta hacia la coda.

Una sinfonía basada en la herencia melódica del romanticismo pero empleando fórmulas que salen del empleo ortodoxo de la tonalidad. Para los vanguardistas de la época les pareció un estilo poco atrevido siguiendo unas pautas ya desfasadas. Para los conservadores, que seguían la música de su maestro Respighi, la encontraron demasiado moderna, con lo cual no convenció a ninguna de las partes enfrentadas.

La crítica de su estreno fue bastante contradictoria. Al año siguiente se presentó en Madrid recibiendo críticas bastante furibundas. El compositor dijo que había quedado escarmentado por el empleo de técnicas modernistas. Pero en comparación con la música contemporánea de la obra su modernidad presenta una gran inocencia.

Actualmente la podemos valorar desde la distancia, apareciendo como una obra atractiva que merecería ser incluida en los programas sinfónicos, que siempre criticaremos por ser demasiado repetitivos y poco reconocedores de la música española.

El 4 de marzo de 1962 Muñoz Molleda ingresa en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, cubriendo la vacante dejada por la muerte de Jesús Guridi. También recibe diversos cargos en secciones musicales del régimen de Franco.

munoz-pcEl "Concierto para piano y orquesta Nº 2 en mi bemol mayor" compuesto en 1969 de estilo postromántico, sigue sus intenciones de abandonar totalmente la atonalidad. Su último concierto lo escribe en 1973, el "Concierto para violonchelo y orquesta" que marca el final de su etapa productiva.

Muños Molleda también ha compuesto música de cámara y para la guitarra, además de música ligera y bandas sonoras para el cine, como "Nada" o "Inés de Castro"  por motivos económicos. También compuso música religiosa como "Los misterios del rosario" de 1957. Después de su regreso a España se convierte junto con Rodrigo en uno de los músicos mimados por el nuevo régimen, interpretándose muchas de sus obras y consiguiendo diversos cargos.

Fallece en Madrid el 26 de mayo de 1988, trasladando sus restos mortales a La Línea de la Concepción, cuyo Ayuntamiento le otorgó la Medalla de Oro de la Ciudad a título póstumo. Una vez más debemos agradecer al director José Luis Temes la grabación de algunas de sus obras sinfónicas.