Hermann Goetz (1840-1876) nació en Königsberg, en aquella época formando parte del este de Prusia, el 7 de diciembre de 1840. Hijo de un comerciante entró pronto en contacto con la música pero no empezó seriamente con sus lecciones de piano hasta 1857.
A finales de la década de 1850 empezó a estudiar un grado en matemáticas, pero pronto lo abandonó entrando en el Conservatorio Stern de Berlín para estudiar piano y composición con Hans von Bülow. En 1862 consiguió su graduación en el conservatorio. A partir de sus 14 años se manifiestan los primeros síntomas de una enfermedad que como a muchos románticos le acompañará a lo largo de toda su vida, la tuberculosis.
Escribe el "Concierto para piano Nº 1 en mi bemol mayor" en 1861 como trabajo de graduación tanto como pianista como compositor.
Se traslada a Suiza en 1863 como organista de la ciudad de Winterthur, gracias a la ayuda de Carl Reinecke. Enseñó piano y empezó a ganarse un renombre como compositor, Compuso una "Sinfonía en mi menor" entre 1866 y 1867 que se estrenó en Basilea el 3 de marzo de 1867. Nunca se publicó y la viuda de Goetz destruyó la partitura después de su muerte.
Uno de los primeros éxitos logrados como concertista de piano fue su "Concierto para piano en si bemol mayor" Op.18 estrenado en Basilea en 1867. Compone el "Concierto para violín en sol mayor" Op.22 en 1868, pero no se interpretó durante la vida del compositor, quedando sin publicar hasta 1880.
En Winterthur conoce a su futura mujer Laura, con la cual se casa en 1868 y de la que tiene una hija. Dos años después se traslada a Hottingen, actualmente un suburbio de Zürich, pero continúa trabajando en Winterthur hasta 1872. Escribe artículos para una revista musical entre 1870 y 1874.
La “Sinfonía en fa mayor" Op.9 fue compuesta entre marzo y junio de 1873. Se estrenó en Mannheim el 25 de diciembre de 1874. Realizó una nueva versión que se estrenó en Leipzig el 27 de enero de 1876.
El primer movimiento, allegro moderato, está escrito en forma sonata mediante dos temas bien diferenciados, que el compositor desarrolla separadamente. El tema principal posee características heroicas y el segundo es más moderado. Sigue las convenciones clásicas en el tratamiento de los temas.
El segundo movimiento, intermezzo, allegretto, añade a sus dos temas un motivo en forma de llamadas de trompa, que aparece por primera vez al principio del movimiento y que se repite varias veces a lo largo del mismo, siendo seguido por un tema danzante, que nos recuerda el estilo de Mendelssohn. Un nuevo motivo de características solemnes en forma de himno es interpretado por la cuerda antes del desarrollo. Una breve recapitulación nos conduce a la suave coda.
El tercer movimiento, adagio ma non troppo lento, es un tranquilo movimiento de características monotemáticas. Un amplio tema de carácter lírico conducido por los violoncelos se desarrolla ampliamente a través de diversas variaciones, interviniendo la cuerda aguda y el viento mediante delicadas frases.
El cuarto movimiento, finale, allegro con fuoco, lo titula el compositor rondo im grossen Stil. Presenta tres temas que luego desarrolla. El tema principal es enérgico y lleno de vida. Un segundo tema consiste en un canon a tres voces. En la coda presenta un cuarto tema, antes de que el tema principal nos lleve a una entusiasta conclusión.
Una obra de música pura de carácter conservador, influenciada por la música de Mendelssohn y de Schumann, apartándose de las corrientes renovadoras. George Bernard Shaw eleva la categoría de la sinfonía a las de Mendelssohn, Schumann y Brahms.
Debido a que su salud se va agravando tiene que dejar su actividad como pianista, pasando los últimos tres años de su vida trabajando como compositor. El éxito logrado por el estreno de su ópera "Der Wiederspenstigen Zähmung", la Fierecilla Domada, que tuvo lugar en Mannheim en 1874, hace que escriba una nueva ópera "Francesca von Rimini", que cuando muere de tuberculosis en Hottingen el 3 de diciembre de 1876 está prácticamente acabada.
En el Siglo XX su obra se olvida. El director Felix Weingartner encuentra incomprensible que su ópera cómica "Der Widerspenstigen Zähmung" haya desaparecido totalmente del repertorio. También compuso música de cámara, música coral como "Nanie" Op.10 en 1874 sobre el poema de Schiller o el "Salmo 137" Op.14 para soprano, coro y orquesta en 1864, además de obras para piano
La música de Goetz puede ser apreciada por su lirismo y claridad, siendo tranquila e introvertida. No busca espectaculares efectos, pero observa una gran maestría en las técnicas de composición, siendo una muestra característica la conexión de motivos de sus profundos movimientos.